Generalmente, esta receta se ve
siempre hecha con calamares, pero, este tiene una carne más fina y delicada que
la pota. De
este plato recuerdo cuando lo hacía mi madre, que era una fiesta, porque nos
encantaba, y ahora, pues nada os lo transmito, para que lo disfrutéis, aquel
que quiera.
Para cuatro personas, necesitamos
para el relleno:
4 potas grandes peladas y sin bigotes
Los bigotes de las potas picaditos
1 cebollita picadita
1 pimiento verde picadito
1 trozo de pimiento rojo picadito
1 tomate, pelado y escurrido el caldo muy picado
Sal, pimienta molida al gusto
1 huevo
4 ó 5 cucharadas de harina
1 chorrito de aceite de oliva virgen extra
Para la salsa:
1 cebolla picada
1 pimiento picado
2 dientes de ajo picados
Pulpa de 1 tomate picada
3 ó 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 copa de manzanilla de Sanlúcar
Orégano, sal y pimienta.
Esto es muy sencillo. Picamos las
verduritas para el relleno, los bigotes de las potas, salpimentamos y añadimos
el huevo y la harina. Con
esto hacemos un relleno que es el introduciremos en las potas.
Limpiamos de piel y de vísceras
las potas. Rellenamos las potas como 2/3 de su capacidad, ya que merman mucho y
pueden romper. Cosemos con un palillo de dientes por el borde.
En una sartén profunda, ponemos
el aceite con la hojita de laurel a fuego medio. Cuando esté caliente, añadimos
los ajos y dejamos que se doren y cuando empiecen a dar olor añadimos las
cebollitas, con un poquito de sal. Un par de minutos o tres y añadimos el pimiento,
con otro poquito de sal y un par de minutos o tres más, ponemos el tomate.
Dejamos reducir.
Ahora, y seguimos a fuego lento,
colocamos las potas en el guisote y las salteamos con cuidado y cariño. Si nos
ha sobrado relleno, y esperemos que así sea, lo ponemos en el sofrito y dejamos
que dore levemente las potas.
Un chorrito de manzanilla y tras
un par de minutos, cubrimos de agua y añadimos orégano, sal y pimienta.
Dejaremos reducir a fuego, lento y pincharemos de vez en cuando con un alfiler,
para que las potas suelten el líquido acumulado en su interior de la propia
carne y no revienten.
Dejaremos que espese la salsa, si
no nos sobró relleno, podemos añadir un poco de maicena desleída en agua, para
engordar la salsa.
Freímos unas patatas y un poco de arroz blanco salteado y
pedazo de plato. Potas rellenos o Cochinitos, como decía mi hermana Inma de
pequeña.
Que delicia nos traes hoy!!
ResponderEliminarUn beso
prueba, es sencilla
EliminarQué pinta tan buena. Yo también tengo un blog de repostería y cocina.
ResponderEliminarTe dejo el link: http://www.dulceriasconsorpresa.com por si te interesa pasarte. Hoy publicaré una receta muy buena de salmorejo.
Si te pasas, espero que te guste. Me quedo por aquí como seguidor.
Un beso,
Adrián.
me pasaré, un saludo
EliminarExcelente estas potas rellenas, me han encantado y me han gustado su relleno. Pero la verdad ya viendo lo que aqui posee he vistoalgunas recetas y la verdad que me han gustado bastante por lo bien conseguida que estan. Asi pues me quedo por aqui y si lo deseas o para lo que quieras me encuentro en www.lacocinadeltiti.blogspot.com. Un saludo y encantado.
ResponderEliminarGracias paisano, aunque ya hace tiempo que te visito y soy seguidor tuyo. Un abrazo
EliminarHola me gusta tu blog y quiero invitarte a unirte a www.recetapordia.es un directorio para blogs y recetas de cocina, sólo tienes que registrar tu blog y aparecerán los enlaces a tus recetas para que te visiten. Un saludo y Gracias. Si tienes alguna duda puedes ponerte en contacto conmigo.
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