Pues nada, seguimos con el rollito de las
masas y lo panes. La verdad es que me encanta hacer pan y en casa disfrutan un
montón, así que yo sigo con mi historia.
400
g de harina de fuerza
2
cucharadas de Aceite de oliva virgen extra
40
g de mantequilla
1
cucharada de sal
2
cucharadas de azúcar
200
ml, aproximadamente, depende de las harinas, de líquido templado, mitad agua y
mitad leche
20
g de levadura prensada
Para empezar, ponemos nuestro horno a
40ºC, a modo de fermentador. Comenzamos con la mezcla de los ingredientes. En
un bol colocamos la harina, con la levadura y
frotamos esta con las manos y la vamos mezclando con la harina e
integrándola en esta.
Ahora colocaremos en la harina, la sal, el
azúcar, el aceite y la mantequilla blandita. Mezclamos con una cuchara o con
las manos y añadimos el líquido, a la temperatura del cuerpo, como si le
fuéramos a dar un biberón a uno de nuestros cachorros cuando eran bebés. Si lo ponemos muy
caliente nos cargamos las levaduras y a 35-40ºC estas se ponen a tope, como en
una noche de sábado con dos copas.
Una vez tenemos integrados todos lo
ingredientes, ponemos un poco de harina en la mesa, tabla, etc., y empezamos a
amasar, al menos por 6 ó 7 minutos. Metemos en el horno con un trapo por encima
y dejamos fermentar hasta doblar el volumen. Como unos 45-50 minutos. Sacamos
nuestra masa y quitamos el aire, apretándola. La metemos en un molde con las
paredes engrasadas con mantequilla y con harina espolvoreada. Tapamos
nuevamente y metemos otra vez en el horno.
Al duplicar el volumen, como ½ hora esta
vez, ponemos el horno a 180-200ºC, por arriba y por abajo sin ventilador.
Pulverizamos con agua por encima del pan y además en el interior del horno y lo
metemos una vez alcanzada la temperatura. Unos 20-25 minutos de cocción.
Desmoldamos y ponemos en una rejilla a enfriar, para que no se acumule humedad
en el pan y nos lo fastidie.
Es perfecto para tenerlo cortado y en el
congelador para el desayuno, o para comerlo con mantequilla y miel, para
merendar como hicieron mis cachorros. Les encantó. Besos a todas, a todos,
a...., besos.
No hay mejor pan que el que se prepara en casa.....embriagan los sentidos. Te ha quedado genial, muy buena pinta, riquisimo.
ResponderEliminarPerfecto que sigáis con las masas, pocas cosas hay tan ricas como nuestro propio pan jejeje
ResponderEliminarbesazos
Otros tantos para ti
Eliminar