Es una receta muy típica en mi tierra, Cádiz. Recuerdo perfectamente cuando la hacía mi madre, y era una bendición. Bueno, ahora la hago yo y no me sale del todo mal. Animaos a hacerla, porque merece la pena
½ kg de guisantes
4 dientes de ajo
1 cebolla grande o dos pequeñas
1 cucharada de harina
1 copa de manzanilla de Sanlúcar
Zumo de limón
Sal
Pimienta negra recién molida
Perejil
Agua
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 hoja de laurel
Lo primero es preparar los alcauciles. Les quitamos el tallo, cortando por la base. Pelamos , hasta que el color de las hojas torna blanquecino. Seguramente estas hojas serán aún duras, pero evita que se deshagan al cocerse. Luego podremos retirarlas en el plato. Cortamos las puntas de los alcauciles, que también son bastante duras. Los meteremos en agua con un chorro de limón, para evitar que se oxide y se pongan negros. El tallo, podemos pelarlo y cortarlo en rodajitas finas y añadirlo.
Pelaremos y picaremos el ajo en láminas y la cebolla en daditos pequeños, o sea, en brunoise. Pondremos el ajo en una cazuela con el aceite de oliva virgen extra y el laurel. Lo pondremos a calentar a fuego medio y añadiremos los ajos.
Cuando el ajo empiece a dar olor añadimos la cebolla y rehogamos a fuego lento, con un poco de sal para que sude, hasta que empieza a cambiar de color.
Añadimos una cucharada de harina y doramos unos segundos. Añadiremos el vino y pasado 1 minuto, más o menos, añadimos agua y los alcauciles.
Salpimentaremos y dejaremos cocer a fuego lento unos 10 minutos y añadiremos los guisantes. Reducirá unos 10 ó 15 minutos más, hasta que la salsa se torna un poco más densa por la presencia de la harina. La cantidad de agua es la suficiente para que con 25 minutos de cocción quede reducida a una salsa. Como 1 ½ litro de agua.
Una vez terminados le pondremos un poco de perejil picado por encima. Os recomiendo acompañarlos con unas patatas fritas y un huevo escalfado. Es muy sencillo de hacer. Ponemos a hervir agua en un cazo con sal y un chorro de vinagre. Esto evitará que el huevo se desparrame por el agua al hacerlos y no da sabor. Cuando el agua rompe a hervir, ponemos al mínimo y metemos el huevo, que antes lo habremos cascado y vertido en un cuenco, metiendo el borde del cuenco dentro del agua. Esto ayudará a que el huevo no se abra ni se rompa. Lo tendremos entre 2,5 y 3 minutos, en función del tamaño del mismo. No lo tocamos, lo dejamos a su ser. Pasado este tiempo lo partamos y colocamos en el plato. Está de muerte.
Hola Moli,
ResponderEliminarsoy italiano y vivo en Murcia.
Soy un apasionado de la gastronomía.
Me gusta mucho esta receta por os motivos:
1.- Me gustan las alcachofas y los guisantes.
Y aveces hago guisos con estos ingredientes.
2.- Me acuerdo mucho della mia mamma cuando
me hacía este guiso ligeramente distinto.
Soy informático y estoy desarrollando una página web sin ánimo de lucro, sin publicidad.
En estos dos últimos años he adelgazado 20 kg. en 9 meses siguiendo la famosa Dieta Mediterránea. Mi web será un diario contando como lo he logrado. Me gustaría copiar algunas imágenes vinculándolas a tu página.
¿Que te pareces?
Ciao Moli