Las recetas de pan son muy
variadas y algunas veces, recetas tradicionales pueden transformarse en otras
diferentes y muy atractivas, simplemente añadiendo unas especias, como en este
caso, que cambian el aroma y el sabor.
Necesitamos:
Para la masa madre:
75 ml de agua templada
Un pellizco de sal
Para la masa de pan:
150 ml aproximadamente de agua templada, puede ser más según las
harinas, así que la cantidad de agua la dejamos solo como indicativa.
Pimienta negra molida
Orégano
Una puntita de comino molido.
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
1 cucharada de azúcar moreno
3 cucharaditas de sal
Comenzamos quitándonos los
anillos, pulsera y cualquier cosa que nos pueda molestar o que se pueda perder
dentro de la masa.
Mezclamos los 100
g de harina con los 75 ml, aproximadamente de agua
templada, la levadura desmigada con las manos,
y el pellizco de sal. Lo
mezclamos todo bien y amasamos hasta obtener una masa pegajosa que dejaremos en
un bol tapado con film transparente hasta que doble de tamaño. Esta es la masa
madre, la primera fermentación del pan.
Una vez que la masa madre ha
duplicado de tamaño, en otro bol ponemos el resto de los ingredientes. Con el
comino, tened cuidado, que sabe mucho, pero la pimienta negra y el orégano, sin
piedad. No os preocupéis, luego el pan no pica, pero sabe a pimienta y es
delicioso.
Mezclamos todo bien y vamos
añadiendo el agua poco a poco, según nos lo valla pidiendo la masa. Quedará una
masa firme pero suave. La cantidad de agua, como hemos dicho antes, variará
según las harinas, así que poco a poco. Cuando la masa está casi lista de textura, o sea, que prácticamente no se pega al amasar, mezclamos con la masa madre. Se nos hará, como hemos dicho anteriormente, una masa firme y suave. La
pasamos a la encimera y comenzamos a amasar durante al menos 10 ó 15 minutos,añadiendo harina si es necesario en la encimera.
El poner un poco de azúcar en el
pan, no afecta realmente al sabor, pero ayuda a las levaduras a fermentar y a
aumentar el volumen del pan.
Este pan es estupendo, es
esponjoso, pero tiene a su vez una densidad en la miga fantástica. Lo cortamos
en rodaja y lo podemos meter en el congelador, y tenemos un pan fantástico para
desayunar. A mi mujer y mis hijos les encanta.
Que buena pinta tiene este pan!!! Tomo nota de la receta,seguro que lo hago.
ResponderEliminarUn saludo
Hola Juan, yo no estoy puesto en panes para nada y tengo una pregunta: ¿en qué momento deben mezclarse la masa madre con la otra?
ResponderEliminarPor cierto, ni que decir tiene que me encanta lo de la pimienta sin piedad, ja ja! Eres de los míos... Tiene una pinta muuuuy buena.
Pues gracias, se me paso colocar ese paso. Ya está incluido. Perdón y gracias nuevamente
EliminarTiene que estar delicioso con ese toque de pimienta y orégano.
ResponderEliminarEs la primera vez que te comento y aprovecho para decirte que tienes un premio en mi blog. Espero que te haga mucha ilusión recibirlo. Puedes pasar a recogerlo cuando quieras. Aquí te dejo el enlace:
http://araekitchen.blogspot.com.es/2013/02/dos-nuevos-premios.html
Me quedo como seguidora para deleitarme con recetas tan ricas como esta. Un saludo.
Que rico, con lo panera que soy!! Me encantaría probar ese pan con esa pinta!
ResponderEliminarSeguro q este pan esta tan bueno como el que comí. En tu casa hace dos sábados , pues yo sin ser panera para comer lo disfrute muchísimo y me encanto. Inma
ResponderEliminarMe encantan las recetas de pan..me quedo con esta! Este pan te dura varios dias? Un saludiño
ResponderEliminarAl menos dura unos tres días. Yo lo que hago es que cuando pasan unos días lo corto a rebanadas y o congelo.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminar