Ir al contenido principal

RAYA EN AMARILLO CON GUISANTES

La Raya es uno de esos pescados malditos en nuestra cocina moderna, y hasta cierto punto lo entiendo, ya que su limpieza y manipulación es tediosa y si compras alguna raya con la piel áspera, es recomendable usar guantes para evitar dejarte la piel. Pero es que lo que te comes luego, es un manjar de sabor y de textura.

Bien os recomiendo comprar bastante cantidad, ya que gran parte de ella, se va en espina central y en el aguijón, pero esto luego se guarda y se saca un caldo increíble para sopas, arroces, etc.


Para 4 necesitamos:

2 rayas, como de 1.250-1.500, cada una, que luego te quedará en limpio menos de la mitad.
2 cebolletas
1 cucharada de harina
2 copas de manzanilla de Sanlúcar
5 dientes de ajo, enteros y machacados contra la encimera
2 rebanadas de pan frito
Una puntita de pimentón. Eso, literalmente, la puntita del cuchillo.
300 gr. de guisantes
Agua
1 hoja de laurel
3 ó 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta molida
Colorante alimenticio o azafrán en hebra.

Si el pescadero no nos hace el favor de limpiarlas, pues nada, le decimos que nos saque las aletas y que nos deje el resto para caldo. Una vez tengamos las aletas en casa, con un cuchillito muy afilado, vamos separando la piel de la carne, desde la zona del corte hacia fuera. Mientras hacemos esto, con la otra mano vamos tirando fuerte, hasta que, por arte de magia y un gran esfuerzo, sale la piel entera.

Cortaremos cada aleta en trozos de tres dedos de grosor, a lo largo de la aleta, a favor de los huesecillos.  Reservamos.

En una tartera amplia, ponemos 3 ó 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra a fuego medio con la hoja de laurel y un diente de ajo cortado en láminas. Cuando empiece a dar olor añadimos las cebolletas cortaditas en daditos, brunoise, con un poco de sal. Vamos removiendo mientras que se rehogan.


En una sartén con aceite abundante, como dos dedos, y a fuego medio, freímos los ajos machacados y el pan. Cuando estén dorados, sacamos a un vaso de batidora y ponemos el pimentón por encima y rociaremos con una cucharada de aceite caliente de haber frito el pan y los ajos. Lo hacemos así para que el pimentón se tueste, pero no se queme. Añadimos un vaso de agua y trituramos con la batidora.


Cuando la cebolla está transparente, añadimos la cucharada  de harina y la doramos, moviéndola sin para. Añadimos el batido y luego el vino blanco. Removemos, por un minuto, para que se queme el alcohol, añadimos los guisantes y cubrimos con el agua. Que tape a los guisantes dos o tres dedos. Salpimentamos, añadimos el azafrán y dejamos reducir.


Una vez en caldo torna  un poco espeso o una salsita ligadita, como unos 20 minutos de cocción, vamos a colocar en él, las piezas de raya salpimentadas. Las haremos unos 3 ó 4 minutos por cada lado, tapaditas y las dejaremos reposar, un par de minutos más,  antes de servir. Si las piezas son gruesas aumentar el tiempo.


 Con unas patatas al vapor es un plato sensacional. Buen provecho.

Comentarios

  1. Cuanto tiempo hace q no la pongo. Deliciosa esta receta. Bstos.

    ResponderEliminar
  2. Yo nunca la he probado. Pero la verdad tu plato tiene una pinta de lo mas apetitoso, eso si, a mi que me la den cocinada o limpia jaja
    Besinos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que limpiarla es un rollo,pero bueno, cosas que tienen la cocina

      Eliminar
  3. Al igual que Belen nunca he probado este plato, pero su pinta tiene, parece delicioso, besos

    ResponderEliminar
  4. Hoy por hoy no es facil encontrar rayas en los mercados...pero están riquisimas. antiguamente se preparaban con mucha frecuencia y esa carne gelatinosa le daba un toque genial a los platos, inclusive frita. Tu receta es una maravilla, un plato mediterráneo, de la mar....excelente!!! bsssss.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es cierto, cada vez ers más difícil encontrarlo, pero como tu bien dices ¡Está tan bueno! que merece la pena comprarlo cada vez que se encuentre. Muchas gracias

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

RECETA PARA COCER BOCAS

Siendo de San Fernando (La Isla de León) y criado en Cádiz, y Cadista hasta las trancas, no me queda más remedio que ser un aficionado a los Cangrejos, las Cañaillas, los Camarones, las Bocas, etc., cocidas, y por tanto os voy a enseñar unos truquillos para aprender a hacerlos. 1 kg de bocas (ojala fueran de la isla) congeladas que están muy apañaditas 3 litros de agua Sal Una hoja de Laurel 1 copa de la Omnipresente Manzanilla de Sanlúcar en todos mis platos. Agua con hielo   Lo primero es colocar un barreño con agua fría con hielo. Ha de estar muy fría. Es para sacar de la cocción el marisco, romper la misma y con el contraste ce temperatura que las cáscaras se despeguen de la carne del marisco. Colocamos en una olla unos 3 litros de agua y vamos a ponerla a fuego muy fuerte. Cuando va calentando vamos añadiendo sal abundante, y vamos removiendo con una varilla o con una cuchara de palo, para ir disolviéndola. Pensad que lo que tenemos que conseguir es ap

GALLINETA AL VAPOR

Prima del cabracho, pero más pequeña, y con menos púas, es una verdadera delicia. Antes era un pescado que solo se usaba para hacer caldo, pero, trabajando en el País Vasco, hace ya como 8 años, descubrí, lo que era comer este pescado al vapor y con un poco de aceite de oliva por encima. Una verdadera delicia, de sabor y de textura y además, sano, sano, sano. Necesitamos: 4 gallinetas 1 hoja de laurel Agua Sal Pimienta molida 6 cucharadas de aceite de oliva virgen extra 1 cucharadita de pimentón dulce. Es muy sencillo. Primero, tendremos que limpiar de tripas y escamas. La gallineta, lleva por dentro, en la ventrecha una tripa negra, que tiñe la carne si se cocina con ella, así que es conveniente eliminarla. Si las vamos a hacer al vapor, en vaporera, ponemos agua con un puñado de sal, a hervir: Las piezas de pescado las colocamos de pié, con el vientre hacia abajo, para que se haga por todos lados por igual, y en la rejilla colocamos una hoja de l

CENA PARA DOS: REJOS DE POTÓN A LA GALLEGA Y BARQUILLOS DE PEPINO CON GAMBAS MACERADAS EN LIMA

Bueno, pues tenemos una nueva entrega de la Cena para Dos. Hoy vamos a presentar unos rejos de potón a la gallega, como sustituto del pulpo. Obviamente el pulpo, tiene más textura y más sabor, pero hay que reconocer que si se trabaja con un poco de cariño queda muy bien. Los barquillos son perfectos para aquellos que nos gusta la textura del pescado y mariscos crudos o macerados en lima. Están   estupendos. Necesitamos: Para 4 barquillos : ½ pepino 6 tomates Sherry Guindilla en vinagre 12 gambas 1 lima Sal Pimienta negra Aceite de oliva Para los Rejos: ½ Kg. De rejos de potón 1 cebolla 4 patatas Sal Pimentón dulce Pimentón picante Aceite de oliva virgen extra Vamos a empezar por los barquillos de pepino. Antes que nada, pelamos las gambas y las ponemos a macerar en jugo de lima con un poco de pimienta, no más de 10 minutos, porque se cuecen. Mejor la lima que el limón, ya que esta es más aromática. La lima la encontráis fácilmente