Es un plato muy típico y
tradicional, pero por desgracia los cardos cada vez se ven menos por los
mercados en fresco, y claro en embotado hace perder bastante al producto.
A mi personalmente, me parece una
plato delicioso y sencillísimo de hacer, y aquí os voy a dar mi receta
personalizada. Por desgracia no encontré almejas y hubo que hacerlos con
chirlas, pero estaban estupendas.
Para 4 personas, necesitamos:
5 hojas de cardo, que limpiaremos de hebras como si fuera una hoja de
apio y cortándolo en trozos grandes. Los meteremos a remojo con agua fría.
½ Kg. de almejas o chirlas, según encontremos
3 dientes de ajo en láminas
1 cebolla cortada en daditos pequeños
1 hoja de laurel
1 copa de manzanilla
2 cucharadas rasas de harina
3 patatas cortadas a gajos y rompiéndolos al final
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 guindilla pequeña
Sal y pimienta molida al gusto
Bien, antes que nada, tendremos
un par de horas las almejas o las chirlas en agua con un poco de sal, para
lavarlas y eliminar la arena que traigan.
En una cazuela, con el aceite de
oliva y el laurel, a fuego medio, pero caliente, comenzamos a rehogar los ajos
y la guindilla.
Cuando empiecen a dar olor,
pondremos las cebollas con un poco de sal. Iremos removiendo hasta que queden
transparentes. Retiraremos la guindilla.
Pondremos los cardos y las
patatas a gajo y rehogaremos un par de minutos. Añadiremos la harina, doraremos
un minuto y añadiremos el vino. Removeremos
y pondremos el caldo, suficiente para que cubra. Salpimentaremos y
dejaremos cocer unos 20 minutos a fuego medio. Si los cardos son muy grandes,
tendremos que cocerlos previamente unos 30 minutos y aprovecharemos el caldo
para el plato.
Ahora pondremos las almejas o las
chirlas, según tengamos, y taparemos 3 minutos, más o menos. Se abrirán y listo
a comer.
Como ya he dicho si vemos que el
cardo es muy grande, habrá que cocerlos un poco antes, pero personalmente los
prefiero al dente que lamiosos.
Con una copa de vino blanco, a su
temperatura, es un plato impresionante.
No veas el mojeteo que tiene que tener! Por suerte, mi padre sí los cultiva y crudos, con una vinagreta están de muerte, pero reconozco que así..mmm!!! un abrazo.
ResponderEliminarQue suerte
EliminarTienes razón cuesta de encontrar cardo fresco, pero a falta de él de vez en cuando hecho mano del de bote y esta receta me encanta.
ResponderEliminarPara eso están. Un abrazo
EliminarMe encanta este plato, es una verdadera delicia, bss
ResponderEliminarTremenda pinta!! Qué bueno,cuando el cardo es bueno sale unos platos riquísimos. Un saludo, me quedo como seguidora por aqui.
ResponderEliminarGracias por venir
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