De vez en cuando, y siempre que tengo tiempo, prefiero
hacer la pasta casera. Está más buena y además es más divertido, aunque quite
un poco de tiempo, eso si, hay que comerla tal y como sale de la olla y se
escurre. Nada de dejarla reposar, con el personal ya sentadito en la mesa con
los cubiertos en la mano.
Necesitamos para 4 personas:
4 huevos
Sal
Aceite de oliva virgen extra, un chorrito
Pimienta recién molida
4 dientes de ajo
2 hojas de laurel
1 guindilla
½ Kg de pulpa de tomate
Azúcar
Pimentón dulce
Lo primero que vamos a hacer es
lavar los mejillones y ponerlos en un cacharro, con agua y sal, para que vayan
eliminando restos y queden limpios. Si los vemos muy sucios por fuera, podemos
darle con un estropajo de aluminio, pero sin usar, lo tendremos solo para estos
menesteres. Pasado un par de horas ya están listos para trabajar.
Una olla con ½ dedo de agua y el
laurel. Fuego fuerte y cuando empiece a hervir el agua, o sea, ya, metemos los
mejillones. Se nos van a hacer al vapor y en su jugo. El caldo lo usaremos para
la salsa. Los
movemos y en unos 7 u 8 minutos están todos abiertos.
Cuando se puedan manipular los
sacamos de la cáscara y les quitamos los trocitos de cordaje que tengan.
Para la pasta fresca, ya sabemos,
mezclamos el huevo con el aceite y la harina y un pellizco de sal. Amasamos y cuando
se nos haga una masa firme, la metemos en film y la dejamos reposar un ½ hora antes
de cortarla.
Preparamos ahora la salsa. Pelamos los
ajos y los picamos en lonchas. Los ponemos en una cazuela a fuego medio y con 3
ó 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra y el laurel. ¡Ah!, perdón, y la guindillita. Cuando
empiece a dar olor, apartamos del fuego y añadimos una cucharada de pimentón
dulce.
Dejamos que se tueste unos
segundos y añadimos el tomate, volviendo la olla al fuego. Salpimentaremos,
añadiremos una o dos cucharas de azúcar, según sea este de ácido y dos cacillos
del caldo de los mejillones. Esto le dará un sabor estupendo.
Dejaremos reducir
a fuego lento, como 20 ó 25 minutos, hasta que quede una salsa espesa, pero no
seca del todo. Me gusta apartarla cuando empiezan a salir como volcancitos.
Si tenemos máquina de hacer
pasta, pues, hacemos cuatro porciones y las estiramos con el rodillo hasta que obtengamos una lámina
de unos 2 mm .
Ahora lo pasaremos por la máquina hasta que obtengamos el grosor deseado. Lo
untaremos con un poco de harina por la superficie y lo pasaremos por la
cuchilla más ancha. Los recogeremos y
los estiraremos, dejándolos secar un poco mientras se calienta el agua,
con un poco de sal.
Si no tenemos máquina de pasta,
hacemos cuatro porciones y las estiramos hasta obtener una plancha de 1 mm , más o menos. Cortamos
como unas cintas de 1 dedo de anchas y dejamos secar, hasta que se caliente el
agua.
Cuando hierva a borbotones,
añadimos la pasta y la dejamos cocer 2 ó 3 minutos, no más. Escurrimos y a
emplatar.
Ponemos en el centro del plato la
pasta, por encima la salsa de tomate y por encima de ésta, los mejillones. No
es necesario el queso rallado, va sobrada de sabor. Al amante de la pimienta
negra, que le espolvoree un poco recién molida y listo.
Una pasta casera genial, que paciencia!! pero el resultado te ha merecido la pena. Besitos!
ResponderEliminarQuerido amigo, pasate por mi blog, tienes un regalo, besos.
ResponderEliminarNo te preocupes, de todos modos te los mereces todos,besos.
ResponderEliminarQué arte!!!!! La verdad es que tiene que ser maravilloso poder hacerlos y degustarlos...yo aún no me he atrevido, es otra de mis muchas asignaturas pendientes en Mi cocina...
ResponderEliminarBesos y buen fin de semana.
¡Pedazo de plato! Y con pasta casera ya superior. Tengo mi maquina de hacer pasta, creo que me voy a animar tras ver esta rica receta
ResponderEliminar¡Saludos y feliz fin de semana!
Yo nunca he probado a hacerla casera.....me parece laboriosa y difícil, pero supongo que todo es ponerse y saber. En tu plato se ve perfecta, y con esta salsa seguro que exquisita.
ResponderEliminarBuen finde
Nunca me ha dado el punto de hacer pasta fresca en casa, pero siempre me ha llamado la atención. Tiene que quedar más rica sí o sí :) Con pasta fresca o seca, desde luego la salsa que nos propones es estupenda.
ResponderEliminarque lujo de receta, tiene que estar buenisima la pasta hecho en casa, que buena la receta!
ResponderEliminarDonde se ponga la pasta casera, que se quite lo demás y si ya me lo acompañas con esta salsita y mejillones tan ricos, que se puede decir de la receta, para rebañar el plato. Besos
ResponderEliminarVaya pintaza y mucho mérito te lo has currado, nunca he hecho pasta casera se rompe con facilidad? Enhorabuena. Un besiño
ResponderEliminarLA pasta casera, si no nos pasamos de harina al preparar la masa, no tiene porque romperse cuando se corta. EL tema es dejarla esponjosa, que no seca, y ponerle por encima harina cuando se estire, para que no se pegue. de Esta manera siempre se puede trabajar y no se resquebraja.
ResponderEliminarEstoy muy contento de que esta receta haya tenido tanto éxito. Muchas gracias a todos, o mejor dicho a todas.
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