Es un plato estupendo, digestivo
y sencillo. Puede complicarse más y poner más condimentos, es típico
encontrarlo así en la red, pero muchas veces en la simplicidad de los platos
tradicionales y en su sencillez, está la satisfacción al comerlos. He intentado
realizar una receta, muy básica y simple, para que los que quieran, puedan
complicarla todo cuanto le apetezca, pero en este caso me quedo con lo más
simple.
Necesitamos:
4 patatas grandes
3 puerros grandes
3 dientes de ajo
1 hoja de laurel
3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
2 cucharadas de harina
1 copa de manzanilla de Sanlúcar
Caldo o fumé de pescado
Sal y pimienta negra recién molida
Lo primero es desalar el bacalao.
Si es en lomos grandes, 48 horas antes y cambiando el agua dos ó tres veces al
día, si son tiras de bacalao 24 horas antes, cambiando el agua 2 ó 3 veces y si
es desmigado pues con 12 horas tienes de sobra, cambiando el agua una vez.
Bien vamos a preparar el fumé.
Yo, generalmente, siempre que compro bacalao fresco, merluza, pescadillas,
etc., suelo congelar las cabezas y/o espinazos de los mismos, si que los uso
deslomados. También guardo el caldo de haber abierto mejillones, y el de cocer
verduras. Con esto, siempre puedes utilizarlos, y agregarlos a guisos y
arroces. Pues bien. Cogemos unas cabezas de pescado, un puerro y un ramillete
de perejil y lo llevamos a ebullición. Espumamos y lo dejamos cocer unos 20
minutos. Colamos y tenemos nuestro caldo de pescado o fumé. Si no tenemos, pues
usaremos agua del grifo, no hay problema.
El bacalao, una vez desalado, lo
cortamos en dados, como de 2 ó 3
cm de grueso y lo reservamos.
Las patatas las vamos a pelar y a
cortar en gajos, cascándolos a final, o sea, rompiendo el último trozo, para
que suelte el almidón y engorde el caldo. Los puerros los cortamos en rodajas,
como de 3 cm
de gruesos.
Tomamos un perol, con el aceite,
el laurel y los ajos machacados, y lo
ponemos a fuego medio.
Cuando empiece a dar olor los
ajos, añadimos las patatas y los puerros, que rehogaremos, al menos unos 5
minutos, todo junto y removiendo con cuchara de palo.
Pasado es tiempo, pondremos las
dos cucharadas de harina y las rehogaremos un par de minutos más, con todo lo
que hay en la olla. Hay
quien fríe unas rebanadas de pan y las maja con ajos fritos, o sin ellos, pero
yo prefiero no alterar en exceso el sabor de lo puerros y el bacalao.
Añadiremos el vino y al minuto el
caldo, que cubra la patata y el puerro. Lo de salpimentar, lo justito que el
bacalao siempre sala algo. Lo dejaremos reducir a fuego lento, como unos 15
minutos.
Ahora pondremos el bacalao y
dejaremos unos 10 minutos más. Ahora, probaremos de sal y rectificaremos,
añadiendo un poco de pimienta molida. Dejaremos reposar, tapadita una ½ hora y
listo.
Ahora servimos, con ese caldito
que ha espesado con la harina y la patata y si queremos, podemos rociar con
unas gotas de aceite de oliva virgen extra crudo. El plato es estupendo. Un
abrazo
Magnifico y con esa copita de Manzanilla de bajo guia, gloria bendita!!! Feliz Semana Santa!!
ResponderEliminarUna maravilla. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminar.
ResponderEliminarAcabei de conhecer o seu blog e achei maravilhoso. Me visite:http://algodaotaodoce.blogspot.com.br/
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Obrigada.
Beijos Marie.
ME PARECE QUE ES UN PLATO BIEN COMPLETO Y SANO Y ADEMÁS EN LA SENCILLEZ ESTÁ LO BUENO DI QUE SI. UN BESITO.
ResponderEliminarGracias por visitar el blog y escribir vuestros comentarios. Un abrazo
ResponderEliminarAparece un plato digestivo y sabroso :, el bacalao tiene variedad de gpisos que admite , está forma me parece sencilla y suave .gm
ResponderEliminarLas recetas sencillas y tradicionales son siempre un acierto. Un saludo
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